Ofrecemos este documento de servicio hecho a conciencia y con un buen tiempo de decante. Ahora deberá actualizarse vitalmente en cada una de nuestras comunidades eclesiales. En nuestras Iglesias particulares se deberá plasmar creativamente y al servicio de la renovación constante de la catequesis. Creemos que, en este rodar del texto por la vida de las comunidades, se irá enriqueciendo y hasta corrigiendo porque habrá aspectos que siempre se podrán revisar y cambiar para un mejor servicio a la transmisión de la fe.
Muchas gracias a las hermanas y hermanos que han trabajado a lo largo de este año para elaborar este documento. Muchas gracias a los queridos catequistas que, a lo largo y a lo ancho de nuestra Patria, sirven al Pueblo de Dios desde la belleza y el compromiso de la animación catequística.